jueves, 25 de abril de 2024

Las sardinas asadas

Coincidimos en una de las bocacalles que desembocan en mi antiguo colegio, que habíamos ido de paseo, a la hierba todavía no le había dado el suficiente sol como para que tuviera toda el mismo color, nos le encontramos descargando el maletero del coche, y charlando nos dijo que un familiar suyo se había comprado una de las casas de los pescadores, de las de detrás de la casa de los maestros, en el Barrio Moscú, que se decía. En el pueblo ya no quedan más, ya no hay viviendas disponibles, dijo.

También que se había incendiado el último restaurante donde se comían sardinas asadas.

Aquí ya no cabemos, eso dijo.

miércoles, 24 de abril de 2024

La anciana y el bebé

No había nadie que atendiera la pescadería y mientras esperaba apareció una señora muy mayor a la que pregunté si quería que sacáramos número pero ella contestó que no hacía falta y que solo había ido a comprar unos chicharros, yo unos lirios, y entonces le pregunté que cómo los preparaba y me dijo que ponía una base de patatas cortadas planas, empanaba el pescado y luego, cuando las patatas estuvieran un poco hechas, echaba los chicharros a la sartén y añadía un chorro de vino blanco y también limón, que su hija solo los comía así.

Iba a preguntar más, qué de su hija, por ejemplo, si vivía con ella o si vivía, que no sé por qué me dio por sospechar que no, o si ella vivía sola y dónde, en qué parte del barrio, o cuánto tenía al pescado en la sartén, por ejemplo, pero llegó la dependienta y se nos acabó el tiempo.

Por la tarde fuimos a una tienda de decoración y en la cola para pagar una madre le decía a su bebé, se lo decía llevándole en brazos esperando, haciendo aspavientos y haciéndose la sorprendida, que si nunca había visto flores, esas cosas que se dicen cuando todas las cosas son las primeras, mientras el bebé trataba de alcanzar un mantel de motivos florales que había comprado la madre.

martes, 23 de abril de 2024

El café de hoy

Ha venido a tomar un café, no lo suele hacer, es hoy porque se lo he pedido yo, a ver cómo está, que últimamente no nos vemos mucho, y a la salida hemos visto que una chica joven conocida con la que habíamos coincidido a la entrada había dejado la bandeja encima de la mesa, no la había retirado. Es una chica a la que le ha ido muy bien.

Eso es lo que hemos conseguido, dice mi madre, que todos esos jóvenes que pudieron estudiar y progresar deshonren sus orígenes.

Que quieran ser como los de arriba, remata.

Decía que a esta chica le ha ido muy bien, de alguna manera como a mi, por eso que no se pueda criticar que mi madre hablara desde la envidia, quizá sí desde el rencor o desde la decepción, incluyéndome, que tampoco yo siento que esté haciendo nada por los demás o ni siquiera por los míos.

Salimos, mi madre abre el paraguas y me cubre, doblando la esquina ella sube la cuesta de los toros, yo me pongo la capucha del abrigo y bajo la calle.

La panoja de Mariuca

Mariuca fue enterrada con una panoja que conservaba de Coterillo, donde nació, una panoja pequeña y naranja, antigua. Estuvo siempre rodando por casa. La metió en el ataúd su nieta, Raquel.

Mariuca tenía una pequeña tienda de ultramarinos adosada al Hotel Colón, en El Sardinero. Fue la primera paciente de la Casa de Salud Valdecilla, aquí.

lunes, 22 de abril de 2024

"La vida nueva de Pedrito de Andía" (Editora Nacional, 1951) de Rafael Sánchez Mazas, recomendación

El autor de este libro es el protagonista del libro de Javier Cercas, después película de David Trueba, Soldados de Salamina, aquel intelectual fascista (fue el que inventó el grito ¡Arriba España!) al que el joven republicano no fusila.

Mirando hacia atrás se me hace un libro barojiano pero más arreglado. Hacia delante, me recuerda a Álvaro Pombo. Pero se me escapa. Es un libro sencillo de un autor seguramente complejo en una época difícil de la que el propio autor fue artífice pero en la que leyendo este libro uno quiere advertir que no se sentía cómodo.

Bases sólidas

domingo, 21 de abril de 2024

Los los

Estados de ánimo en uno mismo son lo que queremos ver como personalidades en los otros.

La clave

Combinar (de forma acertada, se entiende) la elipsis con los detalles es la clave.

sábado, 20 de abril de 2024

Caperucita y el lobo


En la trasera, "Foto Lobeto (Requejada - Santander)".

Otros murales populares se hallan por ejemplo en la venta de Tajahierro, aquí, o en el bar de Jaime el de Lamiña.

Progreso

Desarmaron las antiguas paredes. En previsión de la noche encendieron las lámparas.

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